· Alumnos, profesores y padres de la colonia Maya emprendieron una caminata de esta colonia a la Casa Don Bosco, donde recibirán clases de manera provisional.
Unas 250 personas entre alumnos, profesores, padres de familia de la escuela primaria José Vasconcelos Calderón y habitantes de la Colonia Maya, marcharon de dicha colonia en la zona sur, a la Casa Don Bosco, donde recibirán clases provisionalmente los infantes.
Lo anterior ante las faltas de seguridad que ProtecciónCivil estatal ha determinado para la reconstrucción de una barda la cual fue tirada por el deslave, producto del asentamiento del Fraccionamiento La Moraleja, propiedad de Óscar Liévano Narváez por dos ocasiones.
Fue después las ocho de la mañana que emprendieron la caminata con pancartas demandando se repare el daño y no se construya el dren que están proponiendo en conjunto con las autoridades municipales y del propietario de la Moraleja, pues además no han cubierto los daños a más de 20 viviendas que resultaron afectadas la noche del 5 de junio.
“Nos propusieron un dren pluvial, nos entregaron el proyecto y descubrimos que era un proyecto mal hecho, porque en el proyecto hablaba de colonias de la zona norte, de Cuxtitali, calles que no son de la colonia Maya y nosotros, la gran reflexión que hacemos, es que el dren era un servicio para el señor Liévano, para que el fraccionamiento del señor Liévano, tire su agua y pase por la colonia Maya”, aseguró durante las actividades, Martín López López.
Subrayó que después de estudiar el proyecto, dejaron en claro y coincidieron que “no lo queremos, porque la propuesta que tienen ellos, aunque sea algo novedoso para muchos, nuestros abuelos ya lo hacían, zanjas de infiltración”.
López López hizo saber que en reuniones pasadas invitaron expertos de la Profepa, pero no llegaron, a quienes buscaban junto con Protección Civil del Estado, sobre las zanjas que proponen se realice.
Lamentó que el señor Óscar Liévano, crea que pagando o reparando los daños se soluciona el problema, “pero no es así”.
“Ellos entienden que reparar el daño es pagar miles de pesos a los afectados, decimos no, queremos que repare el daño ecológico y ambiental, hemos aprendido que países como Japón o Ecuador, que han hecho estas propuestas de zanja de infiltración, es decir, se busca el nivel de un lugar y ahí se hace una zanja y haces que se infiltre, entonces enriquece los mantos friáticos, ya hicimos una propuesta y lo están estudiando, pero nos parece que es una acción es económica pero que no la quieren realizar”, apuntó.
Es de recordar, que Martín Jiménez Hernández, director de la institución afectada, en entrevistas pasadas, ha dicho que el 21 de agosto del 2015 por esta misma situación se les cayó una parte de la barda la cual fue reconstruida a mediados de marzo y principios de abril del 2016, pero tras el deslave de la colonia la Moraleja, el 5 de junio también se afectaron 25 metros de barda.
“Ellos entienden que reparar el daño es pagar miles de pesos a los afectados, decimos no, queremos que repare el daño ecológico y ambiental”.