Presos " Solidarios de la Voz del Amate" recluidos en el Cerss 5 piden su liberación
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Presos indígenas, “Solidarios de la Voz del Amate” Adherentes a la Sexta Declaración de la Selva Lacandona del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), recluidos en el Centro de Reinserción Social para Sentenciados número 5, de San Cristóbal de Las Casas, exigieron su liberación.
Desde el penal de San Cristóbal, Diego López Méndez originario del barrio Chixtetic Municipio San Juan Cancuc, de lengua materna tzeltal, denunció que un 18 de julio del 2012 fue detenido en un restaurant bar de San Cristóbal cuando se encontraba trabajando, alrededor de 4 personas le dijeron que saliera del lugar para luego ser detenido y subido en una camioneta, en donde lo golpearon.
“Adentro del carro una de las personas que me detuvo me mostró una foto en su celular de una persona que estaba muerta, me empezó a decir groserías; ya te cargo la chingada, dime la verdad si tú fuiste, le dije que yo no sabia nada, y me llevaron a una casa a lado de San Juan de los Lagos, en ese momento me esposaron y me bajaron del carro me metieron en la casa, estuve media hora, me vendaron los ojos me volvieron a sacar y me subieron nuevamente en el carro, luego me llevaron a otra casa, me desnudaron, me golpearon, luego me trasladaron al penal del Amate, hasta la fecha sigo privado de mi libertad, ahora ya pertenezco a la organización “Solidarios de la voz del Amate”, denunció.
Diego López Méndez, actualmente se encuentra recluido en el CERSS 5, de San Cristóbal, junto con Alejandro Díaz Sántiz y Mariano Pérez Velasco, quienes desde el interior de sus celdas exigen su libertad tras argumentar que son inocentes porque los delitos que les han imputado presuntamente por homicidios nunca lo cometieron.
Al respecto, el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas ha externado que el caso de Diego es uno más de los miles de presos que quedan atrapados en espiral burocrática del lucrativo sistema penitenciario mexicano, que el grupo de trabajo “No estamos Todos”, informó que en 2015, Diego López Méndez inició un camino de lucha junto a otros 6 compañeros formando la organización la voz verdadera del Amate, y que por varios años fueron fraguando movimientos de denuncia dentro del penal para exigir sus derechos.
“Como represalia en noviembre de 2016, por 15 días fue separado de sus compañeros, luego a su regreso con la población interna ya le habían robado todas sus pertenencias, más de 6 años de su detención Diego sigue preso sin sentencia, sin pruebas para condenarlo y con un proceso legal lleno de irregularidades, el grupo de trabajo “No estamos Todos, y el Frayba”, iniciamos una campaña por Diego López Méndez para que su nombre resuene en las calles y en las redes sociales para evidenciar la injusticia", concluyó.